CNRI – Expertos de la ONU señalaron el miércoles que las autoridades en Irán deben dejar de arrestar, juzgar y acosar a los periodistas y activistas de internet, y proveer un lugar seguro para ejercer la libertad de expresión.
“La creciente intimidación contra los periodistas restringe su capacidad de operar libremente en el país” afirmó Ahmed Shaheed, Relator Especial de la ONU sobre Irán. Anotó que en días recientes agentes de inteligencia y seguridad iraníes han arrestado un grupo de periodistas en lo que parece ser una nueva ola de represión a la libertad de expresión y de prensa.
El arresto el 2 de noviembre de cinco periodistas por cinco miembros de la agencia de inteligencia de la Guardia Revolucionaria vestidos de civil fue particularmente preocupante, dijo el Sr. Shaheed.
Se reportó que los periodistas fueron detenidos por sospechosos de tomar parte en una red de infiltración buscando influencia la opinión pública y atacar la imagen de la República Islámica a nombre de gobiernos occidentales de acuerdo a la televisión estatal iraní y reportes de prensa. Más de una docena de periodistas y activistas en redes sociales también se reporta han sido convocados para ser interrogados por las autoridades.
Irán tiene una de las mayores cantidades de periodistas y activistas sociales presos en el mundo, afirmó un comunicado de la ONU, Según cifras de abril del 2015 al menos 45 se encuentran en prisión por actividades pacíficas.
“El gobierno de Irán no debería silenciar voces críticas o disidentes bajo el disfraz de preocupaciones vagas o sin sustancia de seguridad nacional” dijo el Sr. Shaheed. Como miembro parte del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos el régimen iraní tiene obligaciones internacionales de permitir y proteger el derecho a la libertad de prensa y acceso a la información, señaló.
“La libertad de expresión es central para garantizar procesos políticos abiertos, libres y justos. Al final los procesos democráticos son insostenibles si los trabajadores de los medios y los activistas no tienen seguridad para llevar a cabo su vital rol” dijo David Kayle, Relator Especial sobre el derecho a la libertad de opinión y expresión.
El momento de crecientes detenciones y acoso a los periodistas es particularmente preocupante, dijo el Sr. Kaye. “La participación pública en cualquier proceso electoral es virtualmente imposible. Si los medios y la sociedad civil están tan frecuentemente afectados por arrestos y juicio. Desafortunadamente esta preocupación no es nueva y casos similares fueron expresados por expertos de Naciones Unidas sobre el arresto de periodistas justo antes de las elecciones iraníes del 2013”.
Las autoridades iraníes deberían reversar esta tendencia y asegurarse prontamente de “ofrecer un mayor espacio para el libre intercambio de ideas en la proximidad de las elecciones” dijo.
Los expertos de derechos humanos urgieron al régimen iraní liberar a todos los periodistas que han sido arbitraria e ilegalmente arrestados por el pacífico ejercicio de sus derechos fundamentales.