CNRI – El pasado sábado en la estación central de Aarhus un grupo de ciudadanos iraníes se manifestaron contra la altísima tasa de ejecuciones en Irán. También protestaron por el viaje de la próxima semana del presidente de los mulás Hassán Rouhani a la Asamblea General de Naciones Unidas.
Los simpatizantes del principal grupo de oposición democrático iraní, la Organización de Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI/MEK), en la segunda ciudad del país levantaron carteles con inscripciones como “No a Rouhani” y “Alto a las ejecuciones en Irán”.
El martes pasado (15 de septiembre) simpatizantes del PMOI (MEK) protestaron frente a la embajada estadounidense en Copenhague –capital danesa- para condenar la muerte en prisión del activista laboral Shahrokh Zamani el 13 de septiembre.
El Sr. Zamani, quien llevaba cuatro años en prisión en Irán, fue encontrado muerto en su celda con la boca llena de sangre y golpes en la cabeza.
Desde que Hassán Rouhani se posesionó como presidente ha habido un drástico deterioro en la situación de derechos humanos en Irán.
En la primera mitad de este año un reporte del Relator Especial de Naciones Unidas para los Derechos Humanos Ahmad Shaheed notó que durante la presidencia de Rouhani “la situación en general se ha empeorado” con respecto a los derechos humanos.
Iraníes planean manifestarse frente a las Naciones Unidas en Nueva York el 28 de septiembre para denunciar la visita del presidente de los mulás Hassán Rouhani a la Asamblea General de la ONU.
cLa protesta, organizada por la Organización de Comunidades Iraní-Americanas presionará a la comunidad internacional a hacer responsable al régimen iraní por su abominable historial de abusos a los derechos humanos.
El régimen de los mulás en Irán continúa ejecutando más ciudadanos per cápita que cualquier otro país miembro de Naciones Unidas. Alrededor de 2000 personas han sido ejecutadas bajo la presidencia de Rouhani en los dos últimos años.