Amnistía Internacional urge al régimen iraní a detener la ejecución de un joven de 24 años ante un inminente riesgo de ejecución por un crimen que cometió cuando tenía menos de 18 años de edad.
Hamid Ahmadi fue condenado por una cuchillada fatal a un hombre durante una pelea grupal que tuvo lugar cuando tenía 16 años.
“La pena de muerte es un castigo cruel, inhumano y degradante pero es particularmente preocupante que en este caso Irán se disponga a violar la clara prohibición en el derecho internacional de ejecutar a quienes eran niños en el momento de cometer el ilícito. Si la ejecución se lleva a cabo mientras se encuentra bajo revisión de la más alta corte en Irán, también sería un inquietante fallo en la justicia”, dijo Said Boumedouha, sub-director del programa de Oriente Medio y África del Norte de Amnistía Internacional.
“Las autoridades iraníes deben detener inmediatamente sus planes de llevar a cabo esta ejecución”.
“La sentencia a muerte de Hamid Ahmadi contradice una vez más las reiteradas declaraciones de Irán de que no ejecuta a menores infractores y muestra el descarado desinterés de las autoridades por una de las prohibiciones a la utilización de la pena capital” dijo Said Boumedouha