CNRI – En la mañana del 28 de septiembre el régimen iraní en un acto criminal colgó colectivamente a nueve prisioneros en la prisión de Gohardasht en Karaj.
Según reportes de fuentes informadas la ejecución de los prisioneros se llevó a cabo detrás de los pabellones de la prisión.
Los nombres de las víctimas son: Karim Hatamzadeh, Hussein Karami, Majid ganjeh Ali, Ali Raheeli, Adnan Amouri zadeh, Ali Rabii, Mehdi Alizadeh, Mahdi Nazari y Ali Asghar Jahantigh.
También el martes 27 de septiembre en una ejecución colectiva siete prisioneros fueron ahorcados en la prisión de Minab por supuestos cargos relacionados con drogas. Sus nombres son: Khoda bakhsh Balouch, Ali Balouch, Chaker Balouch, Mohammad Mohammad zehi, Majid Nariman, Mehdi Moradi y Mohammad Ghourchi.
El martes 27 de septiembre el CNRI emitió un comunicado condenando las ejecuciones masivas de los mulás y pidió también al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, al Consejo de Derechos Humanos, al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y a todas las organizaciones relevantes tomar acciones inmediatas para confrontar la creciente tasa de ejecuciones en Irán.
El siguiente es el texto de esta declaración
Irán: Ejecución de 17 prisioneros en un día en la prisión Vakil Abad de Mashhad
El inhumano régimen de los mulás ahorcó en un chocante crímen el 11 de septiembre a 17 prisioneros colectivamente en la prisión Vakila Abad de Mashhad. Otros 400 prisioneros se encuentran allí en el corredor de la muerte.
Entre el 13 y el 24 de septiembre 19 prisioneros de Shiraz, Gorgan, Tabas, Tabriz, Bandar Abbas, Rasht, Taybad, Orumiyeh y Neyriz fueron ahorcados.
Al mismo tiempo 13 prisioneros en confinamiento solitario en la prisión de Gohardasht de Karaj y Khorin de Varamin, así como siete prisioneros de entre 25 y 30 años en la prisión central de Minab esperan su ejecución. Se suman ellos a cientos de otros prisioneros en todo el país en el corredor de la muerte, especialmente en la prisión de Ghezel Hessar.
Estas ejecuciones, al igual que la simultánea participación en la Asamblea General de Naciones Unidas del supuesto “moderado” Rouhani demuestran lo vacío y engañoso que es presentarse como “moderados” en el régimen clerical.
Las diferentes facciones internas de la tiranía religiosa que gobierna Irán no se disputan entre sí en lo que tiene que ver con reprimir al pueblo iraní.
Sin poder enfrentar las crisis en casa y la región, especialmente tras la revelación de nueva información sobre la masacre de 30 mil prisioneros políticos en 1988 que aumentan la ira popular contra el régimen, este no ha encontrado otro camino que intensificar la represión y en especial la pena capital. Abdolreza Rahmani Fazli, Ministro del Interior de Rouhani refiriéndose a un informe de 20 mil páginas sobre las patologías sociales reconoció que “la principal amenaza son los asuntos internos” (agencia estatal de noticias ISNA – 26 de septiembre).
La Resistencia Iraní pide al pueblo de Irán, especialmente a la valiente juventud a protestar contra las medidas represivas del régimen y pide solidaridad con las familias de los ejecutados. También pide al Consejo de Seguridad de la ONU, al Consejo de Derechos Humanos, al Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU y a todas las organizaciones relevantes tomar acciones inmediatas para confrontar la creciente tasa de ejecuciones en Irán. El régimen clerical es una desgracia para la humanidad contemporánea, debe ser rechazada de la comunidad internacional, sus líderes llevados ante tribunales internacionales por crímenes contra la humanidad y cualquier relación con este debe condicionarse a una moratoria a las ejecuciones.
Secretariado del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán
26 de septiembre de 2016