CNRI – Reaccionando a algunos comentarios sobre la abolición a la pena de muerte para traficantes de drogas en Irán el Ministro de Justicia del régimen iraní y miembro del “comité de la muerte” responsable por la masacre de miles de prisioneros políticos en 1988, afirmó: “uno de los castigos para una persona corrupta es la ejecución”.
En una entrevista con la agencia estatal de noticias IRNA del viernes 30 de septiembre Mostafa Pour-Mohammadi señaló que no cree que la pena de muerte pueda ser derogada y agregó: “hay casos en los que alguien es fuente de corrupción y su existencia no llevara nada más que a propagar esa corrupción”.
Justificando el aumento en las ejecuciones y la amplificada represión en Irán de parte del régimen clerical Pour-Mohammadi señaló: “el tipo de castigo en cualquier situación debe ser proporcional a su efecto. Académicos, juristas, expertos, psicólogos y criminólogos deberían trabajar juntos para determinar qué clase de castigo sería el más efectivo”.
Por su parte Sadeq Larijani, encargado de la justicia en el régimen iraní enfatizó el viernes que es la idea del sistema judicial eliminar las ejecuciones para los traficantes de droga. Dijo: “¿Cuándo hemos querido eso?… esa idea que las ejecuciones no eran útiles es irrelevante. Pido a todos los fiscales en todo el país no atrasar la implementación de los veredictos y llevarlos a cabo tras ser emitidos. No debemos aplazar su cumplimiento por tres años y dejar a los criminales rezando en prisión y luego decir que como rezan en prisión debemos cancelar sus ejecuciones. No podemos acabar con las ejecuciones en general porque socava el poder disuasivo del poder judicial”.
El encargado de justicia del régimen admitió que las ejecuciones son un medio para establecer la seguridad en la sociedad. Larijani dijo: “una de las razones de la efectividad de estos castigos es su implementación pronta, expedita y decisiva. Es contra los intereses de la sociedad y del poder judicial prolongar el proceso de ejecución”. Criticó “darle una oportunidad durante el juicio” a los acusados de traficar con drogas y dijo “las oficinas de la fiscalía deben guardar la seguridad en todos los niveles y tomar esta tarea con seriedad”.