Protestas y manifestaciones se desataron en Baneh (occidente de Irán) tras los disparos de las Fuerzas de Seguridad Estatales del régimen iraní contra portadores de un mercado.
Residentes de la localidad se reunieron frente a la oficina del gobernador el martes 5 de septiembre y exigieron terminar los ataques contra los pobres trabajadores que intentan ganarse la vida cargando pesadas cargas en sus hombros a través de las fronteras con Irak y Turquía. Algunos mercados y tiendas cerraron en apoyo a la protesta.
Las fuerzas de seguridad del régimen chocaron con los manifestantes, según indican una serie de vídeos difundidos por internet.
Los Guardias Revolucionarios del régimen dispararon contra un grupo y asesinaron a dos hombres en esta ciudad el pasado lunes 4, justo dos semanas después de haber asesinado a otro portador, lo que generó las protestas públicas.
Las víctimas, identificadas como Heydar Faraji y Ghader Bahrami de 21 y 45 años, fueron asesinadas en el distrito del mercado de la ciudad.
Familiares de los trabajadores se reunieron frente a la oficina del gobernador de la ciudad para protestar por los asesinatos. El Sr. Bahrami, una de las víctimas, estaba casado y era padre de cuatro hijos.
Recientemente un diputado del parlamento del régimen reconoció que hace dos semanas otro portador había sido asesinado por miembros de la Guardia Revolucionaria en la misma región. Advirtió que estos incidentes “tocan el corazón de la gente” en el Kurdistán y otras regiones del país.
En la noche del 21 de julio las fuerzas de represión iraníes abrieron fuego contra un grupo de portadores cerca a la ciudad de Sardasht, al occidente de país, hiriendo de gravedad al portador Azad Mina-Abduli. El día anterior, un grupo de estos trabajadores, que pasan grandes dificultades para subsistir, fue atacado por la policía de frontera. Un portador murió y otros dos resultaron gravemente heridos.
Unas semanas atrás, el 25 de junio, otro portador identificado como Karim Mohammad Aminzadeh, de la ciudad de Sardasht perdió la vida después de que fuerzas represivas le disparasen. Otro de estos trabajadores, Mohammad Ahmadiyan resultó gravemente herido en esa ocasión. Cuatro días después, el 29 de junio, otros dos portadores de Sardasht y Piranshahr resultaron también heridos de gravedad por la explosión de una mina.
Más de 68.000 portadores trabajan en las provincias fronterizas de Irán, entre 16.000 y 18.000 de ellos en las ciudades de Piranshahr y Sardasht. La Resistencia Iraní ha pedido repetidamente a organizaciones internacionales condenar los asesinatos de estos pobres trabajadores por parte de la Guardia Revolucionaria del régimen y sus fuerzas de seguridad.