El Mulá Ahmad Zargar, secretario del represivo instituto “por la promoción de la virtud y la prevención del vicio” anunció que se aceleraría el proceso de los arrestados por esta instituacion. Se han establecido “ramas especiales para procesas los casos de promoción de la virtud y prevención del vicio en las cortes de todo el país y en la Corte Suprema”. Agregó que se han emitido “directivas para formar consejos de promoción de la virtud y prevención del vicio en organizaciones, ministerios, entidades religiosas y hasta mezquitas”.
Las represivas fuerzas de seguridad emitieron un comunicado para enfatizar la necesidad de “adherirse más a la moralidad y al hijab y evitar las anormalidades” durante el mes del Ramadán. “Todos los conductores y pasajeros de vehículos públicos o privados deben evitar romper el ayuno, crear polución sonora o actuar contrario a los mandatos religiosos”, escribió.
Bajo el pretexto de “promover la seguridad y tranquilidad pública” durante el Ramadán, el fiscal de Qom Mostafa Barzegar Ganji dijo: “se han hecho planes [para las fuerzas de seguridad] para inspeccionar hogares y escondites”. De la misma manera el fiscal para la provincia de Golestán señaló que quienes no sigan el ayuno recibirán 74 azotes en público
El Coronel Salehi, vice comandante de las fuerzas de seguridad en Khuzestán anunció la amplia presencia de “patrullas de policía, vehículos y agentes a pie” en “la ciudad, los caminos, calles y alrededor de los lugares religiosos” y dijo: en el mes del Ramadán “para seguir la santidad del Ramadán los ciudadanos deben evitar seriamente romper con el ayuno o vestirse de manera inapropiada en lugares públicos, de trabajo, recreacionales, complejos administrativos y calles… y los conductores de vehículos públicos o privados deben también evitar romper el ayuno, crear polución sonora y otras anormalidades”. La policía de Hamadan también anunció la formación de patrullas especiales durante el Ramadán
De esta manera el régimen iraní usa la ocasión del Ramadan para intensificar sus recientes medidas represivas y enfrentar la expansión de protestas populares. Entre las medidas represivas se constatan: la creciente tasa de ejecuciones, arrestos y azotes a cientos de jóvenes en diferentes ciudades bajo el absurdo cargo de participar en fiestas, la inspección de 1025 sedes sindicales, el cierre de 10 jardines y 32 cafés, casas de té y restaurantes en la provincia de Fars, y el sellado de 19 tiendas de ropa bajo el pretexto de “vender ropa no convencional y permsiva” en Tabriz, así como el cierre de 15 salones de belleza en la provincia de Alborz.
Secretariado del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán
4 de junio de 2016