El presidente del régimen iraní, Hasán Rouhani, reconoció que no existe tal cosa como una prensa libre en Irán, durante una reunión con jefes del Ministerio de Información y Tecnología de las Comunicaciones el lunes. Estas declaraciones se enmarcan en una crítica hecha por el presidente al hecho de que todos los medios en el país están a cargo del estado.
Rouhani dijo: “Creemos que hemos recibido la autoridad divina que nos permite ordenar a las personas; ese no es el caso […] Tenemos una prensa dirigida por el gobierno, televisión y radio administrada por el gobierno”. Luego atribuyó el aumento en el uso de las redes sociales a la falta de prensa libre, y dijo que la gente no se vería obligada a hacerlo si se permitiera que existieran medios no gubernamentales.
Rouhani dijo: “(La gente) expresa todo (en las redes sociales) porque no tienen otro lugar para hablar. Si las diversas facciones tuvieran una estación de televisión, expresarían la mitad de sus declaraciones allí. Hablarían oficialmente, no de manera no oficial, y sería claro quién está diciendo qué. Pero ahora (en las redes sociales) no está claro quiénes son estas personas y de dónde vienen”.
Advirtió que los intentos del Régimen de filtrar Internet o prohibir ciertas redes sociales no han logrado impedir que los iraníes las usen para compartir sus opiniones. Rouhani se refirió a esto como “mal uso” de Internet y cree necesario que se imparta más educación sobre cómo usar Internet.
No dijo qué institución ordenó en realidad el filtrado de las plataformas de redes sociales y abogó por la detención de activistas de Internet y administradores de canales de redes sociales en Irán.
La Asamblea de Expertos se reunió con el Ministro de Tecnología de la Información y las Comunicaciones de Irán el 17 de enero para analizar el uso de las plataformas de redes sociales y decretó que el uso de estas era un peligro para la religión y la independencia de Irán en tanto la mayoría de sus plataformas se basan en los Estados Unidos, según Ahmad Jatami, portavoz de la Asamblea.
Dijo: “La pregunta no es si no se deben usar las plataformas de redes sociales. Esto sería como cuando llegó la radio por primera vez, algunos dijeron que no lo usarían a pesar del hecho de que esto era imposible y uno tiene que usar los nuevos espacios e instalaciones. El tema importante es que no debemos permitir que derroten al Estado al usarlas y los funcionarios relevantes tienen que usar su autoridad para contrarrestar esta amenaza”.
Casi la mitad de las 500 páginas web más visitadas en todo el mundo están bloqueadas en Irán, incluidos YouTube, Facebook, Twitter y Telegram, porque los mulás creen que permitir que las personas se comuniquen libremente entre sí y con el mundo exterior es peligroso para el futuro del Régimen. El jefe del Departamento de Espacio Virtual de la Oficina del Fiscal General de Irán dijo a principios de este mes que Irán también se alistaba para filtrar Instagram.