El Consejo Nacional de la Resistencia de Irán condena enérgicamente la sentencia de muerte dictada contra la Sra. Varisha Moradi por la justicia iraní y pide una acción internacional inmediata para conseguir la liberación de esta compatriota kurda.
El 10 de noviembre de 2024, el tristemente célebre juez Abolqasem Salavati condenó a Varisha a muerte por “rebelión armada (Bagh-ye)” en un juicio simulado en el Tribunal Revolucionario de Teherán.
Esta acusación se presentó contra la activista kurda por su presunta pertenencia a la “Comunidad de Mujeres del Kurdistán Oriental”, conocida como “KJAR”.
El mes pasado, los expertos en derechos humanos de las Naciones Unidas advirtieron de un marcado aumento del número de ejecuciones en Irán y pidieron el cese inmediato de estas sentencias.
Más de 450 personas han sido ahorcadas en Irán desde que Pezeshkian asumió el cargo de presidente en julio.
El domingo 10 de noviembre, varios presos políticos de la sección de mujeres de la prisión de Evin se reunieron y protestaron en el patio de la prisión, gritando su enojo por la sentencia de muerte dictada contra la presa política Varisha Moradi. La protesta se desarrolló en dos rondas, a las 15:00 y a las 18:00, durante las horas designadas para el aire libre.
Entre los lemas coreados por los presos políticos se encontraban:
“Muerte al dictador”
“El pabellón de mujeres de Evin se mantiene unido, comprometido hasta que se revoque la pena de muerte”
“Nuestras vidas pueden desaparecer, nuestras cabezas pueden caer, pero la libertad nunca se perderá”
“Dictar sentencias de muerte es la venganza de los gobernantes contra las mujeres kurdas y en todo Irán”