Maryam Rajavi: El nacimiento de Cristo es un mensaje de liberación, libertad y justicia para una humanidad esclavizada
¡Feliz Navidad a nuestros compatriotas cristianos y a todos los seguidores de Cristo!
Salve a Jesucristo, quien llevó el mensaje de libertad para los oprimidos y los afligidos, y una inspiración eterna para aquellos que se levantan en la búsqueda de la justicia y la libertad.
También saludo a la Virgen María, quien se mantuvo firme defendiendo a Jesucristo y Su mensaje redentor, enfrentándose valientemente a las monstruosas fuerzas del mal y la oscuridad de su tiempo, convirtiéndose en un emblema eterno de pureza y liberación.
El nacimiento de Jesús, hijo de María, siempre ha llevado un mensaje de liberación, libertad y justicia para una humanidad encadenada, desde sus inicios hasta el día de hoy.
Es la misma buena nueva proclamada por los ángeles de Dios a los humildes y afligidos: «Les traigo buenas noticias que causarán gran alegría a todo el pueblo. Hoy les ha nacido un Salvador.»
Este día es un faro de esperanza para los «perseguidos por causa de la justicia»,[1] para «los que lloran» y para «los que tienen hambre y sed de justicia.»
Es una promesa de que quien se levante en la lucha por la libertad, «quien busca encuentra.»[2]
Verdaderamente, «todo es posible para el que cree.»
Cristo: Un mensaje de libertad para los oprimidos
En las últimas semanas, una de las dictaduras más despiadadas de la historia moderna—un firme aliado del fascismo religioso gobernante en Irán—ha sido derrocada en Siria. Este acontecimiento esperanzador, ocurrido en vísperas de Navidad, refleja el mensaje intemporal de Cristo: los oprimidos serán liberados.
Es también un faro de esperanza para el pueblo de Irán, que sin duda se liberará de las cadenas de la tiranía de los mulás.
Frente al callejón sin salida de su inevitable derrocamiento, los mulás en el poder han intensificado su campaña de represión: ejecutando a la juventud iraní a diario, librando una guerra contra la libertad, consolidando su misoginia e intensificando la persecución y discriminación contra las minorías étnicas y los seguidores de diversas religiones en todo el país.
No sienten vergüenza al robar el último trozo de pan de las mesas de los pobres. Decenas de millones de personas en el país son mantenidas como rehenes por los precios desorbitados, la pobreza, el desempleo y las crisis de electricidad, agua y aire contaminado.
Sin embargo, en oposición diametral a ellos, los mensajes liberadores de Cristo—junto con las enseñanzas de Moisés y Mahoma—han iluminado continuamente el camino de todos los pueblos oprimidos en su lucha por la libertad, la justicia y la salvación.[3]
Los trabajadores que luchan por la justicia, los valientes miembros de las Unidades de Resistencia y las valientes mujeres y hombres que trabajan incansablemente, día y noche, para preparar el levantamiento, están acercando el momento en que la tiranía de los mulás será derrocada y las infames prisiones de Jamenei serán desmanteladas en todo Irán.
[1] Massoud Rajavi, 24 de diciembre de 1985
[2] Mateo 5:10
[3] Mateo 7:8