CNRI – El miércoles se anunció que la activista iraní por los derechos humanos Narges Mohammadi, detenida en prisión actualmente, ha recibido una sentencia de 10 años por parte del régimen de los mulás.
El despiadado juez-verdugo del régimen Abolqasem Salavati emitió la sentencia por el contrario la campaña por los derechos humanos de Mohammadi. Una farsa de juicio se llevó a cabo en las así llamadas Cortes Revolucionarias de Teherán el 20 de abril del 2016.
Shahin Gobadi del Comité de Asuntos Exteriores del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (CNRI) “condenó firmemente” el miércoles la injusta sentencia.
Afirmó: “ocurre en simultáneo con una situación de derechos humanos en deterioro en Irán, marcada por un marcado aumento en la cifra de ejecuciones y castigos inhumanos en los meses recientes”.
La Sra. Mohammadi, madre de dos hijos, fue enviada a prisión el 5 de mayo de 2015 tras ser arrestada ilegalmente por agentes de inteligencia en su hogar sin garantías judiciales y ser llevada a la prisión Evin. Para presionar a esta prisionera política se le confiscaron todas sus medicinas al ser transferida a la prisión y desde entonces se le niega el acceso a ellas.
La activista fue arrestada por primera vez en junio del 2010 bajo un supuesto cargo de “asamblea y colaboración contra la seguridad nacional” y “propaganda contra el sistema”, y fue condenada a seis años de prisión. Sin embargo debido a la tortura y a la grave condición de las prisiones del régimen desarrolló un problema nervioso y una parálisis muscular durante las interrogaciones. Posteriormente fue liberada bajo una fuerte fianza por su deteriorada condición bajo una resolución que afirmaba que “no estaba en condiciones de cumplir la sentencia”.
La Sra. Mohammadi ha estado activa en defender las familias de prisioneros políticos, participando y hablando en la caremonia en honor al Sr. Sattar Beheshti, trabajador y bloguero martirizado bajo tortura, y protestando contra el lanzamiento de ácido en los rostros de mujeres, así como trabajando por detener las ejecuciones y defender prisioneros de las minorías religiosas y étnicas. Sus actividades han enardecido al fascismo religioso que gobierna Irán
El año pasado se reportó que tras la oposición de la Sra. Mohammadi a la ejecución de un grupo de prisioneros sunitas y su pedido por un juicio justo para ellos, el absurdo cargo de “cooperación con el Estado Islámico” fue agregado a su prontuario. Existe una carta del ministerio de inteligencia en su archivo judicial que pide “el peor castigo contra Narges Mohammad pues no muestra remordimiento”.
La Sra. Sarvnaz Chitsaz, presidenta del Comité de Mujeres del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán urgió el 12 de agosto de 2015 a organizaciones internacionales de derechos humanos y al sr. Ahmed Shaheed, relator especial de la ONU sobre los derechos humanos en Irán, y a otras instituciones relevantes, condenar los arrestos arbitrarios hechos por el régimen iraní y a tomar medidas efectivas para garantizar la liberación de la Sra. Narges Mohammadi y otras prisioneras políticas.