CNRI – A la 1:20 de la mañana del 18 de septiembre de 2014, Taghi Abbasian, residente del Campo Liberty y miembro de la Organización de los Mujahedines del Pueblo de Irán (PMOI/MEK) perdió su vida en la clínica del campo iraquí como resultado del asedio médico inhumano contra el campo y la falta de acceso a atención médica. Sufría de enfermedades del corazón y enfermedad neural motora.
Había formado parte del PMOI por tres décadas, en la lucha por derrocar la dictadura religiosa en el poder en Irán y establecer la democracia y el respeto por los derechos humanos.
Desde el 2009, cuando los Estados Unidos transfirieron la protección del Campo Ashraf a las fuerzas iraquíes, 21 miembros del PMOI en Ashraf y Liberty han fallecido debido al bloqueo médico. Otro grupo de pacientes que sufren de enfermedades muy serias están en situación de alto riesgo por este sitio criminal.
Tal como todos los otros residentes del Campo Liberty, el Sr. Taghi Abbasian era persona protegida tanto por el derecho de refugiados como por la Cuarta Convención de Ginebra, y sufrió innumerables obstáculos en su tratamiento médico. El 8 de abril del 2014 escribió a la oficina de Derechos Humanos de la Misión de Naciones Unidas en Irak:
“Mi nombres es Taghi Abbasian, y sufro de males de corazón y entumecimiento del cuerpo. Tuve un ataque al corazón hace un tiempo. Estoy parcialmente paralizado y mi situación de salud se deteriora. Tras un mes, los doctores de la clínica del campo me prescribieron una angiografía y un RM cerebral. Cuando quise abandonar el campo, las Fuerzas de Inteligencia del Ejército (AIF) no permitieron la salida del campo a una ambulancia, y el camino fue una tortura desde el principio. En el hospital en Bagdad un agente del AIF no me permitió explicar completamente mis problemas al doctor.
El doctor le dijo: ‘desde el punto de vista médico, este paciente debe ser hospitalizado y se le debe tomar una angiografía y otros test’. Sin embargo, el agente de AIF impidió mi hospitalización. Dada mi inestable situación de salud, asigno la responsabilidad de lo que me ocurra al mayor Ahmed Khozeir y su personal”.
El bloqueo médico empeoro para los residentes desde su transferencia a Liberty. Mientras la clínica iraquí del campo carece del equipo básico para tratar emergencias, las fuerzas de Maliki impiden el traslado de equipo médico que los residentes mismos han comprado con su dinero en Ashraf.
La Resistencia Iraní recuerda los repetidos compromisos tomados por escrito por parte del gobierno de Estados Unidos y las Naciones Unidas sobre la seguridad y la protección de los residentes de Liberty y llama a actuar inmediatamente para terminar este asedio criminal y proveer a los residentes acceso irrestricto a servicios médicos en Irak. La Resistencia Iraní recuerda que estas medidas son flagrantes y serias violaciones a tratados internacionales y ejemplos flagrantes de crímenes contra la humanidad, cuyos perpetradores deben ser juzgados.