Llamado a condenar a Teherán y condicionar relaciones a moratoria en ejecuciones
La dictadura religiosa que gobierna Irán continúa emitiendo sentencias de muerte y llevando a cabo ejecuciones. El número de prisioneros ejecutados sólo en el mes de agosto ya supera los 50.
Seyed Jamal Seyed Mousavi, prisionero político sunita kurdo, fue ejecutado el 23 de agosto bajo el falso cargo de “moharebe” (enemistad contra Dios) por haber contactado con grupos sunitas. Sufrió ocho años tras las rejas. El día anterior Ariya Javeedan fue ejecutado en la prisión de Kerman por el mismo cargo y por atentados contra la seguridad.
Alireza Tajiki, arrestado a sus 15 años de edad, fue ejecutado el 10 de agosto tras sufrir seis años de encarcelamiento en la prisión Diesel Abad de Shiraz. Un gran número de prisioneros, arrestados cuando tenían menos de 18 años, se encuentran actualmente en el corredor de la muerte.
En otro caso, otra supuesta “corte” en Irán ha sentenciado a Mohammad Ali Taheri a la pena capital. Presentándose como fundador de un movimiento místico, Taheri no ha cometido ningún crimen, nunca ha tenido un arma y ni siquiera bajo los vagos cargos de moharebe o “corrupción en la tierra” puede ser juzgado por este medieval régimen. Para justificar su ejecución el régimen lo acusó de “proveer educación ilegítima distribuyendo trabajos audiovisuales y uso ilegal de títulos científicos”, mientras todos los altos mandos del régimen están involucrados en robos y atracos a fondos públicos.
Muchos altos mandos del régimen, desde el presidente Hasán Rouhani, el Secretario del Consejo de Discernimiento Mohsen Rezaei, el miembro de este concejo Mohammad Bagher Ghalibaf y el ex ministro del interior Ali Kordan, dicen ser “doctores”, ante la burla y el ridículo del pueblo iraní.
Estos títulos son completamente fabricados o simplemente documentos emitidos por las propias instituciones educativas del régimen bajo órdenes del Ministerio de Inteligencia y de la Guardia Revolucionaria.
La Resistencia Iraní pide a los defensores de los derechos humanos y los órganos relevantes de Naciones Unidas condenar al régimen de los mulás por la emisión de las sentencias de muerte incluyendo la reciente del Sr. Taheri y a tomar acciones urgentes para detener las ejecuciones masivas en Irán. La continuación y la expansión de las relaciones políticas y económicas con este régimen deben estar condicionadas a una moratoria en las ejecuciones una mejoría en las condiciones de derechos humanos
Secretariado del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán
28 de agosto de 2017