Un nutrido grupo de agentes represores de la prisión Evin allanaron el pabellón 250 de la conocida carcel el domingo pasado, unos días antes del aniversario del brutal ataque del año pasado donde varios de prisioneros políticos resultaron gravemente heridos.
El allanamiento contra el pabellón 350, donde actualmente están recluidos 40 prisioneros políticos se llevó a cabo bajo el pretexto de “conducir una inspección”.
El número de guardias de prisión involucrados en la inspección fue muy superior al de los prisioneros políticos, y esta vez vinieron junto con funcionarios de la prisión.
En abril del año pasado el pabellón 350 de la prisión Evin fue objeto de un salvaje ataque por parte de las fuerzas represivas del régimen tras una protesta. En el salvaje llanamiento del 17 de abril, verdugos golpearon e hirieron a varios prisioneros.
Organizaciones internacionales de derechos humanos, incluyendo Amnistía Internacional, condenaron el ataque.
Los golpes iban particularmente enfocados en un grupo de prisioneros acusados de estar afiliados a la Organización de Mojahedines del Pueblo de Irán (PMOI/MEK).
El prisionero político Gholamreza Khossravi fue gravemente herido antes de ser enviado a confinamiento solitario, todavía afectado por sus heridas
Semanas después, el 1ro de junio, el régimen clerical lo ahorcó por apoyar a la Organización de Mohajedines del Pueblo (PMOI/MEK).
El régimen clerical ejecutó a Gholamreza para vengar la resistencia de los prisioneros del pabellón 350 de Evin y otros rebeldes en las prisiones de la dictadura iraní.
Gholamreza Khossravi, de 49 años, pasó 12 en los calabozos del régimen bajo agudas torturas y acosos.
El ataque del domingo en Evin fue seguido por un ataque violento el lunes en Gohardasht contra el pabellón donde se encuentran recluidos los prisioneros políticos.
Los guardas atacaron el ala 12 de la sección 4 de la prisión de Gohardasht y transfirieron al pastor Saeed Abedini, al Sr. Khaled Hardani y al Sr. Mostafa Eskandari a confinamiento solitario. Los agentes represivos maltrataron y acosaron al pastor Saeed Abedini.
En protesta contra las medidas represivas y la transferencia de prisioneros políticos a confinamiento solitario, el pastor Abedini y el Sr. Hardani comenzaron una huelga de hambre.
El régimen iraní ha intensificado las medidas represivas en las prisiones para aumentar el medio y la intimidación en la sociedad y entre los prisioneros políticos, con el objetivo de impedir cualquier expresión pública de disenso contra el régimen tras el paso atrás dado por el Supremo Líder del régimen clerical en las negociaciones nucleares al acordar un “marco de acuerdo”.