Saturday, October 5, 2024
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Video: París, discurso del Senador José María Chiquillo, en conferencia sobre “Fundamentalismo Islámico en Irán”

Discurso de José María Chiquillo, Portavoz de Asuntos Exteriores del Grupo Parlamentario del Partido Popular en el Senado de España

– “Irán es parte del problema y ciertamente nunca aportará nada para de la solución

– “más de 1.200 personas han sido ahorcadas desde que el así llamado “moderado” Rouhani se posesionó como presidente hace más de un año”

– “No debemos rendirnos ante dictadores en ningún rincón del mundo”

Paris 7 de febrero 2015 – Una conferencia internacional titulada “Fundamentalismo islámico: raíces, soluciones, rol del régimen iraní” se llevó a cabo en París -con motivo del 36mo aniversario de la revolución de febrero de 1979 en Irán- bajo invitación del Comité Francés por un Irán Democrático (CFID), y en el que participaron prominentes figuras internacionales.

 

Texto de discurso del Senador José María Chiquillo:

Buenas tardes, admirada y respetada presidenta Rajavi, queridos colegas que me han precedido en el uso de la palabra con discursos brillantes; Para mí ha sido un gran honor compartir este acto porque se aprende. He escuchado con mucha atención y salgo muy ilusionado después de haber escuchado las palabras de libertad que hoy he escuchado aquí.

Queridos amigos y amigas de Irán,

Como portavoz de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado en nombre y representación del Partido Popular, miembro del Partido Popular Europeo, quiero expresar nuestra solidaridad, mi solidaridad con vuestra causa en esta conferencia. Estamos muy preocupados, terriblemente preocupados por el régimen de terror y las constantes violaciones de los derechos humanos en Irán por un gobierno tirano que sacude día sí día también la dignidad de los residentes del Campo Liberty.

Como decía al principio estoy muy contento, satisfecho, orgulloso de estar aquí y de que me consideréis vuestro amigo. Y hoy, una vez más, como hace casi dos años, reafirmar mi compromiso personal con el apoyo a la resistencia iraní.

Como muchos de vosotros recordaréis, en diciembre de 2012 tuve la inmensa fortuna de conocer a  la Sra. Rajavi en Madrid. Realizó una exitosa visita a España en la que yo participé y se dirigió en diversas reuniones a diputados y a senadores y rápidamente advertí sus planteamientos, sus argumentos, sus razones y la fuerza de su única arma: la palabra, la verdad, la honestidad y el compromiso con su gente.

Es más, la reunión previa a la visita, durante la visita y después de la visita de la embajada de Irán en Madrid, que intentó impedir la visita puso de manifiesto quien tenía razón y quien nunca tiene razón: el que intenta imponer y quitar a libertad y la vida a las personas.

Hoy nos hemos reunido aquí un grupo de personas y verdaderamente se ha puesto de manifiesto que es lo que nos une: unos principios y unos valores sin fronteras, sin religiones. Yo soy cristiano pero por encima de todo soy persona y ahí hay unos principios y unos valores: la libertad, la democracia, los derechos humanos, el respeto a la vida y a la dignidad humana que no conocen fronteras y que no conoce religiones. Por encima de todo somos personas.

Muchos de mis colegas en el Congreso y en el Senado como muy bien ha expresado mi compañera Carmen tienen una gran simpatía por este movimiento, porque es el de la fuerza de la palabra, la razón, la que clama justicia y libertad para su pueblo y que quiere romper las cadenas que están sometiendo a los ciudadanos y ciudadanas de Irán bajo un gobierno que les oprime y les quita lo más preciado, la libertad y en muchos casos la vida.

Por esto, cuando escucho que algunos gobiernos piensan hacer una alianza con Irán contra el Estado Islámico, lo encuentro realmente imprudente, como bien lo ha dicho el alcalde Giuliani una idiotez, porque Irán es parte del problema y ciertamente nunca aportará nada para de la solución.

Cualquier alianza con este régimen complicará la situación. El régimen actual de Irán siempre ha sido el principal foco de inestabilidad en Oriente Medio, que ahora quiere exportar a todos los rincones del mundo. Se ha citado sus amistades en Argentina, se han citado sus amistades en Siria, se han comentado sus amistades en Venezuela, se han comentado sus amistades en Corea del Norte. Un país radical que quiere sembrar el terror.

Queridos amigos, más de 1.200 personas han sido ahorcadas desde que el así llamado “moderado” Rouhani se posesionó como presidente hace más de un año. Moderado? Los fundamentalistas, los radicales, los tiranos nunca son moderados. Un tirano lo es, mate a uno o mate a 2000 y lo que tenemos que intentar por todos nuestros medios es que no haya ni una víctima más inocente en Irán ni en ningún lugar del mundo bajo ningún pretexto.

Quiero hacer mías las palabras del alcalde Giuliani, de Patrick Kennedy, pero quiero poner un ejemplo que ha quedado en el ambiente en el día de hoy respecto al problema nuclear. El gran riesgo que corremos todos los ciudadanos del mundo si esa ronda final de negociaciones llega a algún acuerdo, que yo aventuro que sería temerario para la comunidad internacional.

Máxime y no podemos olvidar cuando Rouhani admitió y se jactó durante su campaña presidencial de haber engañado a Occidente cuando era uno de los jefes negociadores del tema nuclear allá por 2006, y logró mantenernos distraídos con unas negociaciones mientras avanzaban su programa en secreto. ¿Podemos fiarnos de los actuales dirigentes de Irán?

Recientemente después de más de siete años de negociación en Naciones Unidas, en abril de 2013 se votó el tratado de comercio de armas. ¿Quién votó que no a ese tratado de comercio de armas que pretende que no se  trafique con armas en países donde no se respeten los derechos humanos, se mata inocentes y se desprecian la vida y la dignidad humana? ¿Quién votó en la asamblea general de Naciones Unidas en abril de 2013? Solo hubo tres países que votaron que no a esa oportunidad para la paz: Corea del Norte, Siria e Irán. Tres países que conforman el eje del mal para toda la humanidad.

Y ese dato está ahí, no podemos confiar en aquellos países que cuando han tenido la ocasión no hace ni siquiera dos años, abril de 2013, entre más de 200 países solo 3 votaron en contra de esa oportunidad para la paz: Irán, Siria y Corea del Norte. Menudo trío, que temeridad sería volver a caer en la trampa y negociar con quien no es de fiar: el eje del mal.

Así que, desde el ángulo que se vea, estamos enfrentados a un régimen – Irán y sus amigos, el eje del mal- que viola sistemáticamente los derechos humanos y no respeta ningún principio ni ninguna regulación internacional.

Tenemos que ponernos del lado de la verdad, de la palabra, de la paz, del lado del pueblo de Irán que hoy muy bien representáis aquí vosotros y que tan dignamente dirige la Señora Rajavi. No debemos rendirnos ante dictadores en ningún rincón del mundo. No podemos rendirnos ante quienes vulneran los derechos humanos –Irán, Venezuela, Siria, Corea del Norte- no podemos rendirnos ni darles ningún voto de confianza, porque ese sería el error más grande que podríamos cometer el mundo democrático y el mundo civilizado.

Debemos ser firmes. Es el único idioma que entienden, la firmeza como muy bien decía el alcalde Giuliani y Patrick Kennedy. Debemos enviar todos y cada uno de los casos de abusos a los derechos humanos del régimen iraní al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Y España, que está en el Consejo de Seguridad sí que tiene un firme, rotundo e inequívoco compromiso en respetar los derechos humanos, la dignidad de las personas, y el derecho a la vida en cualquier rincón del mundo.

Y estoy aquí como todos los que me han precedido en el uso de la palabra para ayudar al pueblo iraní y a su resistencia liderada magníficamente por Maryam Rajavi. Para derrocar esta dictadura maligna para con el pueblo iraní. Para que Irán recupere la libertad y la democracia.

Aquí hemos dicho todos los que estamos aquí y los que estáis ahí un NO rotundo al fundamentalismo, un NO rotundo al integrismo, un NO rotundo al fanatismo y la antítesis de decir no a todos esos males es un claro compromiso de SÍ a la vida, SÍ a la libertad y Sí a la democracia.

Irán tiene que salir del eje del mal y tiene que ser un país libre y democrático y la única garantía de que Irán recupere la libertad, el respeto a los derechos humanos y la dignidad de las personas es que personas como vosotros y personas como Maryam Rajavi tomen las riendas de este país para que Irán sea respetado y querido en el mundo.

Muchas gracias