CNRI – El fundamentalista régimen iraní ahorcó colectivamente a nueve prisioneros el miércoles en la prisión Gohardasht en Karaj, al noroeste de Teherán.
Tres de los prisioneros ejecutados fueron identiciados como Seyyed Mohammad Taheri, Amir Khadem Rezaiyan y Saeid Ahmadi.
Las víctimas habían sido transferidas a confinamiento solitario en los días anteriores a su ejecución.
Más de 270 miembros del Parlamento Europeo firmaron un comunicado conjunto sobre Irán este mes pidiéndole a la Unión Europea “condicionar” sus relaciones con Teherán a una mejora en el tema de derechos humanos.
Los diputados provenientes de todos los Estados Miembros y de todos los grupos políticos del Parlamento afirmaron estar preocupados por el creciente número de ejecuciones en Irán tras el ascenso a la presidencia hace tres años de Hasán Rouhani.
Amnistía Internacional describió el 6 de abril pasado en su reporte sobre la pena de muerte: “Irán ejecutó al menos a 977 personas en el 2015, comparado con al menos 743 el año anterior
“Irán llevó a cabo el 82% de las ejecuciones registradas” en Oriente Medio y Africa del Norte dijo el grupo de derechos humanos
Ha habido al menos 2400 ejecuciones durante la presidencia de Hasán Rouhani. El Relator Especial de Naciones Unidas para la situación de derechos humanos en Irán anunció en marzo que el número de ejecuciones en este país en el 2015 era mayor que la de cualquier otro de los anteriores 25 años. Rouhani ha apoyado explícitamente las ejecuciones como ejemplos de “mandatos de Dios” y “leyes del Parlamento que pertenece al pueblo”.