Reconocimiento del CNRI como única alternativa democrática al régimen clerical es indispensable para rectificar la pasada política desastrosa estadounidense sobre Irán
En parte de su discurso ante la 72º sesión de la Asamblea General de la ONU el 19 de septiembre pasado, el Presidente Donald Trump se refirió al pueblo de Irán y al fascismo religioso que gobierna el país. De manera correcta señaló que “las víctimas que más han sufrido por culpa de los líderes iraníes son de hecho su propio pueblo”. Dijo también, “el mundo entero entiende que la buena gente de Irán quiere un cambio”.
El Presidente de los Estados Unidos señaló que los recursos que pertenecen al pueblo iraní son desviados para defender la dictadura siria de Bashar al-Assad, para atizar la guerra civil en Yemen y para Hezbolá. Dijo también que “las principales exportaciones del régimen son la violencia, el derramamiento de sangre y el caos” y que “a lo que temen los líderes de Irán es a su pueblo”.
Maryam Rajavi, presidenta electa del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (CNRI) celebró las declaraciones del Presidente Trump y las calificó de “primer testimonio de un presidente estadounidense en los pasados 38 años que señala la necesidad de un cambio de régimen en Irán por parte del pueblo iraní, una causa que ha sido la política declarada de la Resistencia Iraní durante 36 años. La Sra. Rajavi agregó: “el reconocimiento del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán como única alternativa democrática a la dictadura terrorista religiosa en Irán es indispensable para terminar y rectificar la desastrosa política pasada de Estados Unidos hacia el pueblo de Irán”.
La Sra. Rajavi citó las promesas rotas para proteger a los residentes de Ashraf y Liberty, la designación como organización terrorista de la Organización de Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI/MEK) que allanó el camino para la represión del principal grupo de oposición a los mulás y las concesiones al régimen que llevaron al acuerdo nuclear como los ejemplos más vergonzantes de acciones estadunidenses con costos significativos y pérdidas para el pueblo de Irán.
La Resistencia Iraní cree que las declaraciones del presidente estadounidense deben ser complementadas con una serie de medidas prácticas con el objetivo de llevarlas a la realidad. Entre estas medidas se podría incluir:
– Llevar a la Corte Penal Internacional el caso de de los crímenes del régimen iraní, particularmente la masacre de 30,000 prisioneros políticos en 1988 y poner a los líderes del régimen y perpetradores de estos crímenes ante la justicia.
– El régimen clerical debe ser expulsado de Oriente Medio y la Guardia Revolucionaria y sus milicias mercenarias deben salir de Irak, Yemen, Siria, Afganistán y Líbano.
– Implementar las resoluciones previas del Consejo de Seguridad de la ONU sobre los proyectos nucleares del régimen, la prohibición de enriquecimiento nuclear y asegurar inspecciones libres e incondicionales de centros militares y no militares
Secretariado del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán
19 de septiembre de 2017